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El caso de la
galleta de la fortuna
Me encanta el dulce, así que siempre que puedo remato la comida
con algún postre. En el restaurante de comida china en el que comimos aquel día
no había más que galletitas de la fortuna. La mía decía (en inglés): "Vas a
recibir un gran honor". Una semana después me comunicaron del Instituto de
Geofísica de la UNAM que me habían nominado para recibir la Medalla "Alfonso
Caso", el mayor honor que puede recibir un estudiante de la UNAM por sus
estudios de posgrado. Escéptica, pensé que no me la iban a dar, pero no fue así.
En junio del 2004, casi un año después de la profecía, tuve en mis manos la
medalla con todo y mi nombre grabado.
Publicación de la Gaceta UNAM sobre la premiación
¿Cómo ves?
La Revista ¿Cómo ves? me ha
distinguido escogiendo mis artículos para las portadas
de tres de sus números, pero el de marzo del 2007
resultó mucho más especial, pues era el número 100 de la
revista. Fue tan especial que lo presentó el mismísimo
Rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente. Aunque
estuve en la presentación no me pregunten qué dijo el
rector porque yo estaba muy ocupada persiguiendo a Pedro
León por el Museo de la Ciencias Universum donde fue la
presentación.
Ver la nota aquí. Leer aquí el artículo
"Volver a la Luna".
Inteligencia terrestre
En 1999 conocí a Frank
Drake. Estábamos en una escuela de astrobiología en Caracas, Venezuela. Me
asombró que estuviera presente en todas las conferencias, incluso las de los
estudiantes. A partir de entonces me lo encontré varias veces en otras reuniones
científicas. Siempre le preguntaba ¿me recuerda? y el decía "sí, Antígona ¿cómo
estas?", así tal cual, en español. El pasado mes de abril del 2007, lo invitamos
a la Reunión de la Sociedad Mexicana de Astrobiología. Como la
organizadora del evento me tocó convivir mucha más de cerca con él. Fue una
hermosa experiencia. Frank Drake es un hombre afable, siempre dispuesto a hablar
con la gente y en especial, con los estudiantes.
Para quienes no sepan de
quien estoy hablando, así en corto, Frank Drake es uno de los padres de la
teoría sobre comunicación con inteligencias extraterrestres. La famosa ecuación
que lleva su nombre en principio sirve para determinar cuantas civilizaciones
comunicativas puede haber en nuestra galaxia, pero su mayor importancia radica
en que ha permitido organizar muchas de las incógnitas que la ciencia debe
resolver para buscar vida extraterrestre en general.
Ahora forma parte de mi
egoteca pues durante la conferencia que impartió en la Reunión de SOMA mencionó
mi trabajo de investigación en varias ocasiones. Sí, leyó mis artículos y habló
de sus resultados como parte importante de la búsqueda de vida en otros mundos.
En fin, si no encontramos inteligencias extraterrestres yo me conformo con el
placer de haber convivido con la inteligencia de Frank Drake que tiene los pies
muy bien puestos en la tierra.
Volver al pasado
Todo empezó con una llamada. Para mi sorpresa, mi mamá me comunicó con el
director de la preparatoria en la que estudié hace... algunos años en la ciudad
de Aguascalientes. El prof. Cuahutémoc me invitó a dar una conferencia
aprovechando que estaría yo de visita unos días antes de la Semana Santa. El dos
de abril, como el desastre absoluto que soy, llego rayando a la Preparatoria
Federal por Cooperación "Lic. Benito Juárez" con bebé, pañalera, madre y
hermana. El auditorio de la escuela está rodeado de jóvenes con uniforme. Eso es
nuevo, en mis tiempos (dirían) no usábamos uniforme. Entro al auditorio y pienso
que yo lo recordaba más grande. Un profesor me indica que los estudiantes no
pueden entrar hasta que mi ponencia esté lista para comenzar. Mientras tanto veo
a los que fueron mis profesores de química, física y cálculo acomodarse en la
sillas de enfrente. Saludos, abrazos, recuerdos. Finalmente todo está listo. Los
estudiantes entran y doy mi conferencia.
Lo mejor viene al final.
El prof. Cuahutémoc Reyes Guerrero me hace entrega de un arreglo floral, un
reconocimiento por la conferencia, una estatua del Quijote y lo mejor, el
reconocimiento "Profa. Rosa Guerrero Ramírez" por mi carrera profesional. Tomé
el micrófono y ¡estaba muda! sólo pude dar atropelladamente las gracias y
reconocer a mis profesores de aquella época de los que por cierto tengo
maravillosos recuerdos, bueno, no de todos, pero los mejores estaban ahí. Me
sorprendió mi repentino mutismo del que el Prof. Cuahutémoc me salvó retirándome
el micrófono. Todo era una sorpresa y como nunca estaba nerviosa enfrente de
aquellos estudiantes que aplaudían a una desconocida que alguna vez había
ocupado su lugar.
Comparto aquí la
invitación que les dieron a los mejores estudiantes de la prepa para poder
entrar la conferencia de la homenajeada (o sea yo). Por cierto que está
algo arrugada porque acabó en la pañalera de Pedrito León después de más abrazos
y recuerdos.
Lo hice de nuevo ¿Cómo ves?
La revista ¿Cómo ves? celebró su décimo aniversario el
diciembre de 2008 y como artículo principal eligieron
uno escrito por mi. La celebración es doble pues el
artículo en cuestión habla del laboratorio donde realicé
mi tesis de doctorado y pueden leerlo
aquí.
Y otra vez en la portada
Esta vez con un artículo sobre la exploración de la Luna
para celebrar los 40 años de la llegada de un ser humano
a la nuestro satélite. Ver aquí
"La Luna que pisamos".
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